Puja por el Impuesto a las Ganancias
- Impulsarg Holding

- 11 mar 2024
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Con el objetivo de generar consensos y lograr una mayor recaudación en las provincias, el Gobierno apunta a modificar el Impuesto a las Ganancias.
El viernes pasado, en Casa Rosada, el jefe de Gabinete Nicolás Posse y el ministro del Interior Guillermo Francos le propusieron a los gobernadores que se empiece a pagar el tributo desde un piso de $1.500.000.
Cabe recordar que la reforma aprobada en plena campaña electoral el año pasado elevó el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias a 15 salarios mínimos, equivalente a un salario mensual de $3.000.000 millones este mes, según el último incremento del salario mínimo a $202.800.
Durante la reunión entre el Poder Ejecutivo y los gobernadores, algunos gobernadores apoyaron la propuesta pero otros mandatarios mostraron disidencias, por lo tanto no hubo acuerdo.
Cabe recordar que, con la aprobación de la nueva ley, dejaron de tributar 800 mil trabajadores, con un costo fiscal anual de 0,4% del PBI. Ahora, tributan solo 90.000 asalariados, menos del 1% de los casi 10 millones de asalariados registrados entre el sector privado (6,4 millones) y el sector público (3,5 millones).
A continuación, algunas opiniones destacadas de diversos expertos en impuestos, consultados por Infobae:
“Habría que aprovechar la oportunidad para trabajar en diseñar un nuevo Impuesto a las Ganancias. Un impuesto diseñado con equidad, por ejemplo entre trabajadores en relación de dependencia y autónomos, que grave los altos ingresos y con una progresividad adecuada sería lo más recomendable”.
“Argentina es un país de alta inflación, por lo cual debe tener actualizaciones automáticas y no discrecionales de los diferentes umbrales que se definan”.
José Simonella, presidente de la Federación Argentina de Consejos Profesionales de Ciencias Económicas
“Sería conveniente que se partiera de montos actualizados. Hay que tomar en cuenta que con los altos índices de inflación que se dieron en estos meses, los importes de deducciones personales y escalas -contemplados en la norma elevada en enero-, deberían adecuarse para luego si aplicar el mecanismo de actualización previsto en el proyecto. Esta medida ayudaría a morigerar el impacto del cambio de régimen, por lo que sería tomada con beneplácito por todos”.
Gabriela Russo, presidente del Consejo Profesional de Ciencias Económicas porteño
“El impuesto debe reformularse de tal manera de tener un mínimo no imponible y el resto de las deducciones personales con un sistema de actualización como mínimo trimestral para que no quede de alguna manera congelado. Debería partir como mínimo de $1.500.000, con alícuotas inferiores, del 5% al 15%”.
César Litvin, contador público experto en impuestos










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