Creció el stock de importaciones pendientes de pago: la estrategia del BCRA para normalizar el comercio exterior

Desde que asumió Milei, la deuda comercial se incrementó en más de U$S 9.000 millones y explicó gran parte de las reservas que acumuló desde entonces el Banco Central. Con los U$S 30.000 millones de stock vigentes antes del 13/12, es una posible presión que miran con atención los economistas de cara al objetivo de retirar el cepo cambiario lo antes posible.

Según indicaron fuentes del equipo económico, esto es parte de la estrategia diseñada por el Gobierno: sumar un colchón de divisas rápidamente y dejar fluir el comercio exterior ante una situación de ahogamiento de las empresas que es crítica.

La opinión de los especialistas

El jefe de research de Romano Group, Salvador Vitelli, estimó que la “nueva” deuda comercial por importación de bienes sumó U$S 9.390 millones desde el 13/12 hasta el 29/2, según los últimos datos oficiales. El BCRA compró divisas por unos U$S 8.500 millones en ese período, tras el salto cambiario.

El economista mostró el camino hacia la normalización de la hoja de ruta oficial: "En febrero se autorizaron importaciones por U$S 4.093 millones y se pagó el 42% de lo devengado. Es el mejor nivel desde octubre 2023 en términos relativos y desde septiembre en términos absolutos. En diciembre solo se habían pagado el 17% y en enero el 24% del total".

"La idea es avanzar en la normalización del comercio internacional. Era lo que esperábamos por diseño para que el comercio pueda fluir. Arrancamos en cero y con déficit comercial. Para eso pusimos las cuotas, si las importaciones aumentan va a crecer la deuda. Si bajan, se va a ir cancelando", dijo una fuente del equipo económico. 

Un informe de Fundación Capital repasó que a fines de 2023 se estimaba una deuda comercial producto de la diferencia entre las importaciones realizadas y las pagadas de U$S 57.800 millones. El padrón que abrió el BCRA con la llegada de Santiago Bausili registró un total de U$S 42.600 millones, con fecha de corte 13/12.

“Así, siendo que la deuda comercial del último lustro promedió U$S 29.100 millones por año, unos U$S 13.500 millones serían el extra a regularizar, según las autoridades. De este total, se resolverían con las distintas herramientas propuestas a la fecha unos U$S 11.200 millones”, destacó la entidad fundada por Martín Redrado.

La herramienta elegida fue el Bono Para la Reconstrucción de una Argentina Libre (Bopreal), por el cual los importadores dejaban sus pesos y recibían un título nominado en dólares.

El Bopreal 1 alcanzó suscripciones por U$S 5.000 millones y el 2 por U$S 2.000 millones. A eso se suma U$S 1.200 millones de acceso que tuvieron las pymes. El Bopreal 3 sumó apenas U$S 981 millones de los U$S 3.000 millones que tiene como margen la licitación. 

A esos casi U$S 30.000 millones de deuda se sumó desde el 13/12 último una nueva deuda por el esquema de cuotas diferenciales de acceso a divisas para pagar en el exterior (Comunicación “A” 7917 BCRA). La disponibilidad es inmediata para hidrocarburos y energía, farmacéuticos y fertilizantes es de 30 días, autos y bienes suntuarios 180 días y el resto es 25% cada 30 días. Recientemente se bajó a 30 días para unas 3.000 posiciones arancelarias de productos de la canasta básica.

"El porcentaje de compras externas pagas de bienes ascenderá al 59% en marzo, en abril al 79,8%, en mayo el 96,4% y junio 103,2%, ya que se comenzarán a abonar autos y bienes suntuarios ingresados en diciembre. Hacia el último tercio del año será de 119,3%. No se espera que se incremente el stock de la "nueva" deuda comercial de unos U$S 9.0000 millones por un superávit comercial muy positivo en 2024 (U$S 19.026 millones)”, proyectó Fundación Capital.

El director de la consultora Analytica, Claudio Caprarulo, explicó que la caída de las importaciones de febrero comienza a reflejar mejor la coyuntura económica actual. "Diciembre y enero estuvo influenciado por pedidos que se hicieron en meses de incertidumbre, donde había más restricciones y la actividad era más alta", dijo.

"El esquema de pago diferido de importaciones explica en buena medida la acumulación de reservas en los primeros meses, por eso son claves las exportaciones del agro y el impacto de la recesión una vez que se regularice el pago de las importaciones", agregó.

"El Central compró unos U$S 10.000 millones, aunque sumó menos reservas netas porque hubo pagos de deuda en el medio. Desde abril el Gobierno espera ya tener algún colchón de dólares que le permita estar holgado", comentó Vitelli.

------------------